jueves, 27 de agosto de 2009

fragmentos...

82

Fresca.
Nunca serás silencio.
Verbo ante la quietud genuflexa.
Desprendida de una pluma inédita o arrebatada a excelso poeta.
Latirás pecho adentro de los hombres.

83

Plenilunio danzante centinela anochecido.
Elucubraciones de noches eternas.
Eres tú la magia.
Poesía.
Aire sobre mi piel reseca de naderías.
Haz tu danza en mi cintura.
Baila.

84

Viento libre el beso que sin tiempo transcurrido danza.
Dios agoniza en rostros de “ayeres” sin recuerdos.
María tiene sed.
Copa agrietada su tener.

85

Noche cae sobre los montes y las selvas.
Hacen bases o proponen incesto fastuoso.
Una relación carnal.

Somos especiales, muy especiales.

86

Roja palabra
Roja caricia
Rojas las almas
Rojo tu amor, rojo.

Tomemos los rojos, hagamos la historia.

lunes, 24 de agosto de 2009

BEMBA... GRACIAS POR LA EXPLICACION




Y A AL RESTO QUE SE OFRECIÓ... TAMBIÉN...

martes, 18 de agosto de 2009

TAREA CIRCULAR



Hoy arranco esta poesía circular
De cabeza y alma al viento y sin pensar... En el rocío...
Sin espejos a la espalda del laurel
Con mi sombra agazapada bajo el pincel... De tu pelo.

Y subo, subo y subo la montaña de tu pecho en espiral.
Y subo, subo y bajo, bajo y subo y bajo
Y vuelvo a comenzar, tarea circular.

Partiré mi corazón entre razón
Y las ganas de brincar desde el abismo... De tu espalda...
Y frenético el tic-tac tic-tac tic-tac
Que renguea y aleja mis agujas... De tu tiempo.

Y subo, subo y subo la montaña de tu pecho en espiral.
Y subo, subo y bajo, bajo y subo y bajo
Y vuelvo a comenzar, tarea circular.

(La marea... Nos marea).

Y mis dedos cual saetas llegarán
A rozar imperceptibles tu azul... De plenilunio...
Y las hojas incendiadas del ayer
Desangradas por la tinta de mi piel... Se harán carne...

Y subo, subo y subo la montaña de tu pecho en espiral.
Y subo, subo y bajo, bajo y subo y bajo
Y vuelvo a comenzar, tarea circular.

(La marea... Nos marea).

jueves, 13 de agosto de 2009

Al morir diremos...

Solíamos salir por la ventana hacia el fin del universo.
Solíamos volver cansados del amor y del placer...
Solíamos llover, solíamos ser sol en el espacio.
Solíamos querer, solíamos ser luz... Y piel.

Solíamos cruzar los límites que ponía la curia.
Solíamos nadar en mares de algodón y de cristal...
Solíamos saber, solíamos creer entender todo.
Solíamos rezar al santo dios de la revolución...

Adónde fue a parar la fuerza juvenil de mi guitarra.
Adarga que ayer supo brillar...

Solíamos volar sin alas y caer al infinito.
Solíamos morder la fruta que ayer alguien prohibió...
Solíamos viajar, amar la tierra y a todos los hombres.
Solíamos gritar sin miedo el odio por la explotación...

Solíamos hablar, café mediante, hasta la madrugada.
Solíamos fumar y con el humo armar una ilusión...
Solíamos formar a las generaciones venideras.
Solíamos rezar al santo dios de la revolución...

Adónde fue a parar la fuerza juvenil de mi guitarra.
Adarga que ayer supo brillar...

martes, 4 de agosto de 2009

Hija, terrenísima. Majestuosa.

Lo que diré en estas líneas, tú ya lo sabes de sobra...

Eres, y siempre serás, la canción de la vida, un grito de libertad y mi mirada encendida. Cuando te vi no creí que fueses del todo mía, y hoy sigo pensando igual, eres de la noche y del día. Hija del cielo y del mar, tuya. Espero que descalza camines para sentir que estás viva, pero ten presente siempre que el camino a la verdad es solamente de ida.
No cerques tu corazón, nunca lo aísles del mundo, pues para amar a una flor hay que amarse, amar a todas las flores y darse.
Hoy, descalzo deseo de verte crecer, yo. Tú, protesta en la puerta del corazón por no cerrar ojos despabilados que deben soñar y reír. Pregunta inoportuna en tiempos sin respuestas, tú. Yo, vive, ama, se.
Mañana, tras la puerta suspiro joven anhelará sentir tu piel y la vida dará un giro inesperado pero inolvidable, mujer.
Yo pintaré de blanco mi cabeza y seré caballito de los jinetes que nos regales. Pero si la vida nos juega una mala pasada, pues suele suceder, nos daremos fuerzas para poder seguir, por el resto del respirar.


Te amaré y cuidaré hasta ser solo calcio.